Hace algunos días, el cura párroco de Paillaco, Reumén y alrededores, padre Nelson Huaquimil, recibió la noticia de que a contar de 1 de enero, asumirá como Vicario General de la Diócesis de Valdivia.
DiarioPaillaco.cl conversó con el padre sobre los desafíos del nuevo cargo y los cambios que tendrá que vivir en su vida personal.
¿Cómo recibió la noticia? ¿Lo esperaba?
Sabía que había una posibilidad, pero cuando se hizo público me sorprendió, porque no lo esperaba, no por las capacidades, sino por la responsabilidad que implica. Sentí miedo, porque significa una mayor radicalidad en el seguimiento de Cristo y en la fidelidad de la Iglesia; si he tratado de llevar una vida humilde y medianamente pobre, ahora tengo que ser más humilde y más pobre que antes.
¿Cuáles son sus nuevas obligaciones como Vicario General?
El Vicario General es quien reemplaza al obispo en su ausencia y al mismo tiempo, se equipara en cierta medida. Involucra ver todos los acontecimientos de la diócesis, sobre todo a nivel administrativo. El Vicario General administra la diócesis junto al consejo económico diocesano y se encarga de velar por todas las parroquias de la diócesis.
¿Continuará como cura párroco de Paillaco?
Sigo siendo el cura párroco de Paillaco, Reumén y sus alrededores, pero ahora se suma el trabajo a nivel diocesano. Ha habido muchas interpretaciones, creen que me voy a Valdivia, pero no, yo sigo en Paillaco, al menos por enero y febrero, después se verá la posibilidad de un traslado.
¿Influyó en su nombramiento los cambios que el Papa Francisco ha realizado en la Iglesia?
Sí, exactamente ayuda en todo esto, porque tiene que ver con nuevos perfiles en la Iglesia. Yo creo que los nombramientos de obispos y vicarios generales van a ir teniendo un nuevo perfil, más parecido a lo que el Papa Francisco espera. Yo estoy tranquilo, porque el Papa Francisco me ha ayudado mucho en los sueños que tengo para la Iglesia; en el seguimiento de Cristo, en la apertura al mundo, entonces estoy muy en sintonía con él.
¿Qué ha significado este nombramiento en lo personal?
Me cambió la vida. Estoy empezando a vivir el duelo, porque tuve que renunciar a mis compromisos académicos en la Universidad de la Frontera y en la Universidad Católica de Temuco. Para mí es un dolor, porque me gusta mucho estar en la universidad, no sólo por el trabajo, sino por marcar presencia sacerdotal y acompañar la búsqueda de mis alumnos.
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