Comprender los desafíos, dudas y dificultades que se pueden encontrar tanto en la universidad como en el mundo laboral, la Escuela de Ingeniería Civil en Informática decidió reunir a sus alumnas y profesoras en un encuentro realizado en el Campus Miraflores de la Universidad Austral de Chile.
La académica del Instituto de informática, Marianna Villarroel comentó que la iniciativa, que reunió a profesoras, estudiantes y egresadas de la carrera, nació como “una respuesta a la falta de mujeres, a nivel mundial, en el área de ingeniería y tecnología”.
“Vimos que las mujeres están muy lejanas a nuestra carrera y que ingresan alrededor de tres por año en un universo de ochenta. Esto es algo que nos llama la atención hace mucho tiempo y el primer paso para saber la razón es investigar en nuestro grupo de alumnas, de egresadas y profesoras”, explicó la ingeniera UACh.
Por su parte, Sandra Elgueta, alumna de quinto año destacó la posibilidad de conocer la experiencia de compañeras egresadas, en proceso de titulación, o de quienes están recién ingresando a la UACh. “No había tenido la posibilidad de mezclar diferentes puntos de vistas y llegar a algo como lo que se está haciendo en este encuentro. Sería bueno tener más mujeres en la carrera, se necesitan más informáticas. Estamos en déficit”, explicó la estudiante.
Su compañera de carrera, Paula Canales, que cursa tercer año también destacó la activa participación de alumnas y profesoras. “Es una actividad entretenida y enriquecedora, de las realidades de las compañeras más grandes podemos entender para dónde va la cosa”, comentó la alumna de Ingeniería UACh, quien agregó que si bien cuando ingresó a estudiar sabía que habrían pocas mujeres estudiando Ingeniería Civil en Informática, le llamó la atención que fueran tan pocas comparadas con otras especialidades.
La actividad se desarrolló utilizando la modalidad de Café Mundial, la cual es una metodología que posibilita el intercambio de ideas por medio de rondas de conversación en las cuales los participantes van cambiando de mesas y mezclándose entre ellos.
“Esto es algo que estaba latente y que todas queríamos que pasara. Tuvimos buena respuesta de las profesoras y las alumnas. La informática no es un mundo lejano para las mujeres, es una carrera muy versátil que permite trabajar en distintas áreas, crear cosas nuevas, nuevos mundos con la libertad para trabajar muchos proyectos al mismo tiempo”, finalizó la académica Marianna Villarroel.
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