Conoce a la primera mujer conductora de camión forestal de Los Ríos

Madre de dos hijos, viene de una familia del ambiente camionero. Entérate de quién es esta paillaquina que ganó un espacio en un rubro de tradición masculina.

Liliana Salazar, oriunda de Paillaco, es la primera conductora forestal de la región y está marcando un hito en esta actividad productiva de Los Ríos, al acceder a un trabajo con tradición masculina. 

Su jefe destaca su responsabilidad y compromiso, mientras en Corma valoran los avances que esto representa para la equidad de género en el sector, en sintonía con el programa +MujerForestal, impulsado por el gremio.

El desafío de disminuir las brechas de género en la sociedad chilena y aumentar la participación femenina en todos los ámbitos, es un reto donde la industria de la madera no se ha quedado atrás.

Este cambio está siendo impulsado a través del proyecto +MujerForestal, iniciativa que busca elevar a un 20% la participación de la mujer, reducir las brechas de género y liderar la participación femenina en la industria forestal mundial. La iniciativa es impulsada por la Corporación Chilena de la Madera -Corma- en conjunto con otros gremios forestales.

Pionera en Los Ríos

Liliana Salazar es la única mujer en el equipo de quince conductores de la empresa transportista Los Robles, de Paillaco, que es contratista de la empresa Arauco para su planta en San José de la Mariquina.

“Me siento feliz en mi nuevo trabajo, las mujeres estamos ganando muchos espacios y en rubros de tradición masculina, como el forestal. Las mujeres nos empoderamos cada vez más en la sociedad”, afirma Liliana, de 36 años de edad y madre de dos hijos.

Sobre su experiencia previa en el transporte de carga y su vínculo con el sector maderero, Liliana comenta que si bien es la primera vez que maneja un camión forestal, antes manejó camiones municipales.

"Tengo experiencia en este trabajo y una historia familiar muy ligada a las máquinas. Además, soy de Paillaco, una comuna con mucha tradición forestal”, cuenta la conductora, cuyo marido también es camionero en Transportes Los Robles.

Liliana recuerda que su padre, cuando era niña, le enseñó en el campo a manejar tractores, por lo que su vínculo con las máquinas viene desde la infancia. Esa experiencia le ha permitido tener un conocimiento técnico básico de la mantención y niveles del motor, estado de neumáticos y de la carga.

Responsable, eficiente y comprometida

Para el dueño de Transportes Los Robles, Flavio Norambuena, tal conocimiento ha sido un valor agregado de Liliana para acceder al cargo. 

“Liliana es una conductora muy responsable, eficiente y comprometida con su trabajo. A ello se suma que ella ya venía con conocimientos mecánicos básicos sobre las máquinas y los utiliza en su rutina de trabajo, lo que sin duda le da un plus ”, destaca.

Norambuena estima que el puesto que se ganó Liliana es una forma también de aportar como empleador a la equidad de género en el ámbito laboral y “una manera de borrar los estigmas, como el que una mujer no puede manejar un camión”.  

“En Transportes Los Robles, mi señora Pamela Oporto, es dueña del 50% de la sociedad y ha sido clave en la toma de decisiones para contratar a otras mujeres que se desempeñan en puestos clave”, afirma.

Respecto del trabajo de conductor de camiones, reconoce que la automatización del montaje de los carros y del acoplamiento de “muela” ha facilitado que las mujeres accedan a ese rol.

Mujeres en la primera línea forestal

Para el presidente de Corma Los Ríos, Cristián Durán, el caso de Liliana es una iniciativa ejemplar para empoderar a la mujer en la industria forestal. 

“El hito de Liliana Salazar en Los Ríos es prueba de ello y, además, demuestra que la mujer en nuestro sector no solo está ingresando en el área ejecutiva, sino también en lo que llamamos la primera línea forestal, como lo es el trabajo con maquinaria en los predios forestales”, puntualizó.

Cristián Durán valora que una mujer de Paillaco, comuna muy ligada al sector forestal, se desempeñe en la industria maderera de Los Ríos y que haya accedido a un trabajo donde las mujeres no tenían espacio. 

“El caso de Liliana sirve para romper paradigmas. Demuestra que los cambios culturales y el avance tecnológico en nuestro rubro permiten que las mujeres puedan conducir camiones forestales de muy buena forma”, concluyó.