Una caravana de vehículos acompañó la carroza que salió a las 10 de la mañana, desde El Llolly, para despedir a María Elena Fuentealba Aravena.
La vecina de la localidad rural, ubicada a 35 kilómetros de Paillaco, fue asesinada por su esposo la mañana del sábado, tras una larga historia de violencia intrafamiliar.
“No más violencia intrafamiliar, en cualquiera de sus formas”, dijo el padre Nelson Huaquimil en la misa que se ofició en la Parroquia Nuestra Señora de Lourdes de Paillaco.
El vicario de la Diócesis de Valdivia pidió a los jóvenes y adultos no aceptar el maltrato y llamó a ser valientes para denunciar estos casos, aunque los protagonistas sean los vecinos.
“Pidamos a Dios que la muerte de María Elena nos de la valentía para denunciar”, expresó el padre.
En estos momentos, el cortejo fúnebre se dirige hacia el Cementerio Municipal para dejar los restos de María Elena descansar en paz.
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