Diferentes razones ambientales son las que inciden en la propagación del Hantavirus, más aún, en temporada estival en que los riesgos de contagio aumentan. Por ello, la Seremi de Salud de Los Ríos, Dra. Regina Barra junto al médico veterinario y profesional de la sección de Zoonosis, Dr. Roberto Wiegand, realizaron un llamado reforzar las medidas de prevención de este virus y a estar atentos a los síntomas que provoca esta enfermedad.
Según explicó la autoridad regional, “en temporada de primavera-verano aumenta el riesgo de enfermar por Hantavirus y contagiarse, lo que se debe a dos principales razones: por un lado el incremento de ratones colilarga en esta temporada, y porque en esta época del año, aumentan las actividades al aire libre como acampar y acercarnos a lugares donde hay mayor vegetación. Por ello, la importancia de la prevención”.
El Hantavirus “es una enfermedad que puede llegar a ser extremadamente grave, a pesar del tratamiento oportuno e intensivo, lamentablemente tiene una alta mortalidad. De allí, la importancia de cuidarse y de prevenir el contagio. Es tremendamente relevante estar atentos a la aparición de síntomas que son muy similares a los de coronavirus, es decir, fiebre, dolor muscular, dificultad respiratoria y, ante estos síntomas y a los antecedentes de haber estado acampando, haciendo recolección de leña o cualquier otra actividad de riesgo de este tipo, se debe consultar a tiempo, de modo que los equipos clínicos puedan hacer la identificación del cuadro clínico”.
Por su parte, el Dr. Wiegand detalló que “ésta es una enfermedad de tipo viral que es transmitida por roedores silvestres a las personas. El roedor es conocido como ratón colilargo ó Oligoryzomys Longicaudatus. En esta zona tenemos tres tipos de roedores silvestres: el ratón Longipilis de pelo largo, que vive en los bosques y el ratoncito Oliváceo, que prácticamente comparte el medio ambiente con el colilarga, que es el reservorio del hantavirus. Éstos, habitan en sectores rurales y peri boscosos de nuestra región”.
Agregó que “una persona, al acercarse a los ratones o su medioambiente se puede infectar. El roedor libera el virus a través de sus secreciones, orina, saliva y/o excrementos, y las personas pueden encontrar esta enfermedad a través de la respiración, de la mucosa ocular, a través de la boca por ingestión y tomar el ratón o su excremento. Por lo tanto, sabiendo cuáles son las formas de ingreso de esta enfermedad a nuestro cuerpo, se deben tomar todas las precauciones, usando guantes, mascarilla N 95 idealmente sin válvula de exhalación; ya que de esa forma evitamos respirar el virus. Además, estamos obligados a usar antiparras y así protegemos la mucosa ocular”.
Medidas de Prevención
El Dr. Wiegand aclara que “el virus tiene ciertas características, como por ejemplo, que es sensible a luz del sol. Media hora con luz, aunque esté nublado, lo mata. Es sensible al cloro, por lo tanto utilizando cloro con una botella atomizadora de agua nos permite protegernos del virus. Si tomamos 2 cucharadas soperas de cloro y la mezclamos con un litro de agua, podemos tener un desinfectante ideal para protegernos y defendernos del hantavirus”.
Añade que es “importante la desinfección, el aseo: la limpieza de basura. Si se va a acampar, se deben utilizar carpas en buenas condiciones, sin agujeros y manejar nuestra comida de forma protegida, bien envasadas. Evitar tener golosinas dentro de la carpa porque estos roedores se alimentan de semillas, y los chocolates por ejemplo, son un foco de atracción”.
Finalmente, el profesional argumenta que “el principal mensaje es el llamado a protegernos del hantavirus con elementos de protección. Cuando realizamos actividades de control de maleza o de roedores, se debe mantener a los roedores alejados de nuestro entorno”.
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