Con un hermoso día de sol, se realizó el funeral de José Luis Miranda Oyarzo, joven reumenino que perdió la vida en el fatídico accidente producto de la colisión de un camión con un bus de la empresa Tur Bus.
Cientos de reumeninos repletaron las dependencias de la Iglesia Nuestra Señora de Lourdes para decir el último adiós a su querido “Kelo” y, con la fuerza del cariño hacia la familia Miranda Oyarzo, recorrieron a pie la larga distancia entre la iglesia y el cementerio.
Durante el trayecto destacó la gran asistencia de funcionarios de la empresa Tur Bus, quienes viajaron a despedir a quien dejara una huella en ellos. “A toda la tripulación de Tur Bus nos impactó la forma en que él partió. Nosotros trabajamos un buen tiempo juntos, fue mi asistente. José para mí fue más que un amigo, lo conocí a fondo y estoy muy afectado por todo esto”, comentó su compañero Paul Cáceres.
En las exequias, conmovió el acto de sus colegas, quienes se sacaron sus corbatas institucionales y las depositaron sobre la urna; luego, se abrazaron alrededor de ella, despidiendo así a su compañero de viajes.
FAMILIA DE BOMBEROS
José Luis fue voluntario de la Primera Compañía de Bomberos de Reumén, al igual que su padre, hermano y actualmente su hermana, razón por la que el deceso del joven marcó profundamente a la institución. “Sentí emoción, pero una emoción dolorosa, no tuve palabras para dirigirme a la familia en el momento. Fue algo que no perjudicó solamente a ellos, sino a los bomberos en general, porque es muy difícil encontrar a una familia que pertenezca por completo a nuestra institución”, señaló el Comandante del Cuerpo de Bomberos de Reumén, Miguel Ángel Espinoza.
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